La cubertería se considera uno de los componentes estrella a la hora de poner la mesa. Igual que sucede con la vajilla, la cubertería es un elemento imprescindible en cualquier mesa, ya sea formal o informal. Si bien es cierto que la mayoría de cubiertos siguen una línea básica, cada vez son más y más diferentes las opciones que tenemos a la hora de decorar y preparar nuestra mesa, eso sí, respetando siempre ciertas normas básicas de protocolo.
Materiales de cubertería
El material más utilizado sigue siendo el acero inoxidable, aunque existen otros materiales reservados normalmente para ocasiones más formales, como la plata y la alpaca.
Cuberterías mixtas. Estas cuberterías combinan acero inoxidable en la hoja de los cuchillos, con mangos hechos con los más variados materiales: nácar, mármol, metacrilato, madera o incluso plástico. Dependiendo de la combinación de materiales y colores, estas cuberterías son ideales para dar un toque informal y de color a nuestra mesa.
Colocación de la cubertería
El cuchillo debe colocarse a la derecha del plato, a unos 3 ó 4 centímetros de distancia del mismo, con el filo hacia dentro. La cuchara se coloca a la derecha del cuchillo, con la concavidad hacia arriba. Y el tenedor se coloca a la izquierda del plato, con las puntas hacia arriba.
El orden de utilización es sencillo: se empieza utilizando los cubiertos más alejados del plato, de fuera hacia adentro.
En el caso de que haya cubiertos adicionales, como pueden ser los cubiertos destinados al consumo de marisco,la disposición de los mismos sigue las mismas reglas anteriores, teniendo en cuenta el orden de servicio de los platos. Es decir, si hay un pescado antes de la carne, los cubiertos de pescado deben estar más hacia el exterior que los de la carne. Lo mismo ocurre si tenemos más de una cuchara.
Los cubiertos de postre se colocan en la parte superior del plato, y en otras ocasiones, sólo se ponen en el momento de servir los postres.
Fuente: embassy.es
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